Antes de dejar el cargo los gobernadores departamentales que fueron nombrados por el expresidente, Alejandro Giammattei, quieren dejar distribuidos entre sus alcaldes allegados Q600 millones. El monto está asignado dentro del Presupuesto General de la Nación para el programa de la Gran Cruzada Nacional por la Nutrición.
El artículo establece que los recursos serán ejecutados por los Consejos Departamentales de Desarrollo (Codede) para proyectos de agua, saneamiento, drenajes, educación, infraestructura y otros que estén relacionados con el tema de mejorar la nutrición del país.
Por ejemplo, el pasado 22 de enero el Gobernador Departamental de Quiché, Gerson Morales, en su calidad de presidente de Codede convocó a los 21 alcaldes del departamento para presentarles los proyectos a financiarse con dichos fondos.
Un día después el titular de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplan) giro una instrucción a todos los delegados de la institución a no presentarse a las reuniones convocadas por los gobernadores. La otra instrucción es que den a conocer el correcto procedimiento para distribuir los recursos asignados al proyecto de la Gran Cruzada Nacional por la Nutrición.
Los representantes de Segeplan fungen como secretario de los Codede y son quienes le dan legalidad a las reuniones que realizan los gobernadores. La orden es que la distribución de los Q600 millones se realizará conforme a loas prioridades y necesidades de la población y no de forma discrecional.
El presidente Arévalo aún no designa a sus gobernadores, recientemente declaró que se está trabajando en un nuevo plan que modificará el funcionamiento de los gobiernos locales.
En proceso de nombramientos
“Más allá de plantearnos la designación de gobernadores, lo que estamos haciendo es el diseño para un cambio en el funcionamiento de las gobernaciones y en la creación de gobiernos de espacio local”, informó el presidente.
Debido a que el mandatario aún no ha nombrado gobernadores, los que fueron designados por el expresidente Giammattei aún se encuentran en funciones de sus cargos. La designación de estos es una decisión política ya que a pesar de que no ejecutan programas son quienes impulsan el cumplimiento de políticas y acciones generales y sectoriales del gobierno central.
Analistas resaltan que la decisión es de importancia porque asumen el rol de líderes, son la representación del presidente en sus municipios y coadyuvan al buen funcionamiento del aparato estatal. En gobiernos anteriores, los gobernadores han sido una pieza clave al buscar el apoyo local al Ejecutivo en el Congreso o para el pago de favores de campaña electoral.
“Las discusiones que se llevan a cabo en estos espacios —los Codedes— son participativas, pero también técnicas y parten de la solución de problemas en infraestructura y sociales o en identificación de oportunidades para la inversión”, refirió el analista Ricardo Barreno.
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