La Contraloría General de Cuentas (CGC) no es solo un órgano fiscalizador, su papel en la democracia es clave por la emisión de finiquitos y el tema no será ignorado por los diputados cuando decidan elegir al próximo Contralor.
Actualmente el Legislativo ya tiene en su poder la nómina de los seis candidatos, solo es cuestión que el tema se programe en alguna sesión de Pleno para que los diputados nombren al nuevo jefe de la CGC.
No habría motivo alguno para que los diputados no prioricen el tema a criterio de organizaciones sociales, tomando en cuenta que el pasado 13 de octubre venció el plazo constitucional del Contralor.
Desde esa fecha la jefatura de la CGC está de manera interina a cargo de Mario Xocoy, subcobntralor de probidad. Este profesional se postuló para el cargo pero no fue incluido en el listado final.
Esa nómina de seis candidatos llega a un Congreso en donde las negociaciones y apuestas políticas parecen ir en aumento cada minuto pudiendo complicar la elección.
Actualmente se discute el presupuesto 2023, una nueva Ley de Contrataciones impulsada por el presidente Alejandro Giammattei y se especula sobre una elección de Cortes.
Este último punto estaría siendo pactado entre Vamos por una Guatemala Diferente (Vamos), el partido de Gobierno, y la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) de Sandra Torres.
“El interés político por la elección de esta autoridad irá creciendo cada vez más; mientras más tiempo transcurra para la elección, la intervención política y negociaciones sobre la designación de esta autoridad también podrían ir aumentando”, advirtió María José López, analista de Guatemala Visible.
Plazo constitucional
Además de la advertencia emitida por López, los congresistas tendrían que priorizar la elección del Contralor porque ya están contra reloj y no hacerlo significa violar otro plazo constitucional.
La CSJ ha pasado más de tres años sin ser renovada, la analista espera que esta historia no se repita porque hacerlo significaría un golpe devastador para la Constitución.
“No quisiéramos ver que este patrón se repita en la elección de otras autoridades, pues crea un precedente peligroso en el no cumplimiento de los plazos de ley y la normalización del debilitamiento del Estado de Derecho y de la democracia”, comentó la analista.
Para la elección de Contralor se necesitan al menos 81 votos a favor, cantidad que la alianza oficialista del Congreso consigue sin ninguna dificultad y lo han puesto en evidencia con la aprobación de nuevas leyes o con la ratificación de medidas de excepción.
“Además de recordarle al Congreso que realice la elección a la brevedad posible también les tenemos que exigir que elijan al mejor perfil para el cargo, tomando en cuenta la trascendencia que esta autoridad tendrá en la vida de cada uno de nosotros”, concluyó López.
Profesional de calidad
En la misma línea que López, Pedro Cruz presidente de la organización Primero Guatemala considera que la elección tiene que ser pronto, más no significa que se deje de priorizar la calidad del profesional.
“Política es política, desaforadamente hay que negociar para llegar a los acuerdos porque es como funciona, pero al decir que la política es política también hablamos que las decisiones deben de ser para el bien común aplicando el artículo 113 donde se habla de los méritos para optar a un cargo público”, refirió.
Es necesario que se midan los méritos de cada uno de los seis candidatos para optar el mejor, cumulo de cualidades que permitirían tener en el escenario ideal a un Contralor independiente, honesto y con la preparación para dirigir un órgano de Estado de la magnitud de la CGC.
“Lo que se necesitaría es evitar que el nombramiento responda a razones políticas para poder generar esa confianza en la ciudadanía, para que se perciba que se tiene a un Contralor con capacidades, idoneidad y honradez que están en el artículo 113 de la Constitución”, destacó Virginia Pinto, de la Asociación en Investigación y Estudios Sociales (ASIES).
Recientemente varias organizaciones sociales que integran Foro Guatemala; incluidos Guatemala Visible, Primero Guatemala y Asies, solicitaron públicamente al Congreso priorizar la elección de Contralor tras reconocer el trabajo de preselección hecho por la Comisión de Postulación.
La nómina
El primer seleccionado fue Carlos Humberto Echeverría Guzmán quien consiguió el apoyo de 22 comisionados; también fue el aspirante con mejor calificación alcanzando una nota de 89.83 puntos.
La segunda en integrar la lista de candidatos fue Adriana Estévez Clavería, quien consiguió una puntuación de 80.98.
El tercer candidato es Marvin Antonio Berdúo Matzir, quien en una tercera ronda de votación llegó a 17 votos, dicho profesional tuvo una calificación de 73.17.
En una cuarta ronda de votación Frank Helmuth Bode Fuentes obtuvo 16 votos, convirtiéndose en el cuarto candidato para dirigir la CGC. En la tabla de gradación alcanzó una nota de 81.53 puntos.
En esa misma ronda el aspirante Julio Ottoniel Roca Morales se convirtió en el quinto candidato para la nómina. Él obtuvo una nota de 77.97 en la tabla degradación.
La última casilla fue para Jorge Luis Maldonado Maldonado, quien obtuvo la segunda calificación más alta con 81.56 puntos.
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